Plantillas Ortopédicas:
Numerosas lesiones y alteraciones morfo-funcionales y biomecánicas en los corredores se tratan con el uso de plantillas ortopédicas personalizadas.
Problemas como los pies planos o cavos, las discrepancias en la longitud de las piernas, las lesiones en las rodillas, los espolones calcáneos, la periostitis, la tendinitis aquileana, la fascitis plantar, etcétera, son sólo algunas de las problemáticas que se combaten con las plantillas ortopédicas. Especialmente, su uso está enfocado en el realineamiento de las extremidades inferiores, además de proporcionar soporte a diversas zonas de los pies y brindar amortiguación a través de los materiales que conforman las plantillas.
No obstante, las opiniones entre los especialistas aún se encuentran divididas acerca de los beneficios que tienen las plantillas ortopédicas en los corredores. Algunos están convencidos de su efectividad en numerosas afecciones, mientras que otros comentan que su utilidad y funcionalidad todavía requiere de mayores investigaciones.
Dada la movilidad de la articulación del tobillo y la capacidad de deformación de los pies durante la actividad física, y por los elevados kilometrajes que actualmente están recorriendo los corredores en sus entrenamientos diarios, es frecuente que la funcionalidad adecuada de dichas regiones anatómicas del cuerpo se vea alterada o disminuida, lo cual provoca la aparición de numerosas lesiones.
Una de las utilidades de las zapatillas para correr es la de servir como herramienta de trabajo para que el médico solucione algunos de los problemas morfo-funcionales detectados en las extremidades inferiores de los atletas.
Así que, mientras continúa el debate sobre las plantillas, tras el examen médico del especialista, y si éste lo considera pertinente, prescribirá al corredor el uso de plantillas ortopédicas personalizadas, cuyo objetivo primordial es restablecer la adecuada armonía y funcionalidad de los tobillos y pies del atleta durante la práctica deportiva.
Asimismo, la mayoría de los modelos de zapatillas cuentan con plantillas removibles, es decir que se pueden retirar para colocar las prescritas por el médico. Los avances tecnológicos son tales que incluso las actuales plantillas ortopédicas pueden fabricarse con materiales sumamente funcionales para el deportista (como el Neopreno, el Pelite y el Plastazote), los cuales responden con creces a las exigencias de las carreras diarias. No obstante, es importante realizar algunos comentarios con respecto al uso de las plantillas ortopédicas prescritas a los atletas para su uso durante la carrera: sólo un médico, el traumatólogo ortopedista o un médico especialista en medicina del deporte deben prescribir el uso de plantillas ortopédicas.
Ellos son profesionales capacitados y familiarizados con la anatomía del cuerpo humano, con las alteraciones presentes en las extremidades inferiores y con las posibles soluciones a las lesiones de un deportista. Por lo tanto, el médico, o en todo caso tú mismo con los conocimientos que ahora posees, deberán definir qué modelo de zapatilla es el más apropiado para tu estilo de pisada para que colabore, junto con las plantillas ortopédicas, en la corrección de las alteraciones detectadas.
A continuación ofrezco un ejemplo: Si el médico detecta que X corredor en posición estático presenta pies planos grado 2, y a su vez, las zapatillas usadas del atleta muestran en correlación el desgaste y deformación clásica de la sobrepronación moderada, seguramente prescribirá el uso de plantillas ortopédicas con soporte o barra longitudinal interna de X centímetros de altura, las cuales proporcionarán el alineamiento y sostén adecuados a las bóvedas plantares que se hallan vencidas. Pero si las plantillas ortopédicas se insertan en un modelo cuya forma sea curva, como es el caso de los modelos de la categoría de amortiguación, entonces las zapatillas, inutilizarán la funcionalidad de las plantillas ortopédicas.
Por el contrario, resultaría ideal, en este ejemplo, el uso de un modelo de la categoría de estabilidad junto con las plantillas (para corregir la sobrepronación moderada, los cuales proporcionarían una base o plataforma que aporte estabilidad interna a los pies del deportista.
El objetivo final es lograr que tanto las zapatillas como las plantillas ortopédicas trabajen a la par, durante la carrera, en beneficio del ultramaratoniano. Acóplate gradualmente al uso de las plantillas ortopédicas, es decir, retira las plantillas de las zapatillas e inserta las ortopédicas y, por una semana cuando menos, sólo camina con ellas.
Después, alterna su uso, trotando y caminando por otra semana o más días, para finalmente, si el médico así lo sugiere, entrenar diariamente con ellas.
Esta recomendación se basa en el hecho de que a menudo muchos corredores insertan las plantillas ortopédicas nuevas y salen a correr normalmente, pero como se diseñaron para proporcionar soporte a las partes del pie que no lo tenían de manera natural, entonces generan muchos dolores y molestias en sus primeros días de uso, y esto es causa común para abandonar su uso.
Por el contrario, la adaptación gradual al uso de plantillas ortopédicas puede hacer más tolerables tus carreras diarias.